Una de las cosas más bonitas de las plantas de interior es que están vivas y siempre cambian. A veces eso significa que, como a nosotros, se les queda pequeño el entorno y necesitan un poco más de espacio vital. Cuando llega el momento de trasplantar una planta y darle un poco más de espacio para que extienda sus raíces, es importante tomar medidas para facilitarle cuidadosamente su nuevo hogar. Si no eres muy aficionado a la jardinería, puede que te ponga nervioso interferir con tu planta y prefieras dejarla a su aire. Sin embargo, como veremos, para trasplantar no hace falta ser un experto en jardinería. Además, su planta se lo agradecerá
¿Debo trasplantar mi planta?
La mayoría de las plantas de interior se han ganado su reputación como variedades de interior, ya que pueden tolerar comparativamente más sombra que sus primas de exterior. Para algunas plantas (sobre todo las de flor, como las orquídeas) es esencial trasladarlas a un lugar más grande con regularidad o, al menos, hacerles un mantenimiento de las raíces para garantizar que sigan floreciendo. Si su espacio se llena demasiado y sus raíces crecen en exceso, es más fácil que se pasen de agua y empiecen a mostrar signos de estrés
Cómo saber cuándo ha llegado el momento de trasplantar una planta
Hay algunas señales de advertencia a las que debe prestar atención antes de decidir trasladar una planta de interior a una maceta más grande. Por ejemplo
- Las raíces sobresalen de los agujeros de drenaje
- El agua de la tierra no drena correctamente
- La tierra se vuelve blanda y polvorienta
- La planta parece estar creciendo demasiado para su maceta
- La planta no puede mantenerse en pie por sí sola
Paso 1 – Elegir la maceta
A la hora de elegir una maceta, siempre hay que tener cuidado de no elegir una demasiado grande. Esto puede ser tan problemático para una planta como una maceta demasiado pequeña. A veces, sin embargo, si estás contento con el tamaño de tu planta, puedes reutilizar la misma maceta de antes y simplemente refrescar la tierra de la maceta y recortar y desenredar las raíces hasta conseguir un tamaño más cómodo
Paso 2 – Libere con cuidado la planta de su maceta actual
A veces las plantas pueden quedar muy encajadas en la maceta. Si esto ocurre, lo único que tienes que hacer para liberarla es darle un poco de agua para que el cepellón se mantenga unido. A continuación, con un cuchillo de cocina o un objeto largo y plano, afloja los bordes de la planta alrededor del borde de la maceta. Una vez que hayas conseguido aflojarla un poco, es hora de sacar la planta. La mejor manera de hacerlo es poner el recipiente boca abajo (asegurándote de que la planta no se caiga por la parte superior de la maceta) y sacarla con cuidado. Cuando tengas el cepellón al aire libre, es buena idea examinar las raíces en busca de plagas o enfermedades. Aunque el trasplante por sí solo debería garantizar que tu planta no enferme de ninguna enfermedad desagradable
Paso 3 – Colocar la planta en su nueva maceta
En la mayoría de los casos, basta con colocar la planta tal cual. En algunos casos, sin embargo, puede ser necesario podar un poco las raíces con un cuchillo afilado. Antes de colocar la planta en la maceta, es conveniente añadir un poco de sustrato de cultivo en el fondo para que la planta tenga espacio para crecer hacia abajo y hacia fuera. También puede evitar el desorden durante esta fase tapando el orificio de drenaje del fondo de la maceta con filtros de café para que la tierra se quede dentro y el agua pueda salir
Paso 4 – Rellene la mezcla para macetas
Cuando la planta esté bien asentada. A continuación, debes rellenar el sustrato para que la planta enraíce correctamente. Para que la planta tenga raíces sanas, es importante elegir el sustrato adecuado. Ya sean virutas de corteza, compost o tierra para cactus, siempre debes elegir la mezcla que más le guste a la planta para que se mantenga sana y feliz
Paso 5 – Riega la mezcla
Una vez que la planta esté en su nueva maceta. Lo único que queda por hacer es regar un poco la nueva mezcla (aunque no demasiado) para animar a las raíces a instalarse en su nuevo espacio.
Mantener las plantas en maceta verdes y exuberantes no cuesta mucho. Un poco de cuidado y atención de vez en cuando es más que suficiente para que sigan floreciendo. Si vas a regalar una planta este año, recuerda compartir nuestros consejos con tu afortunado destinatario ;)Compartir plantas en todo el mundo es fácil con FloraQueen. Realizamos envíos a más de 100 países de todo el mundo y nos dedicamos a repartir sonrisas donde y cuando más se necesitan.