Los bonsáis son básicamente una versión en miniatura de un árbol grande. Se cultivan en macetas decorativas y son excelentes plantas de interior. Originalmente, los bonsáis eran una antigua forma de arte japonés. Mucha gente conoce algunos tipos comunes de árboles bonsái. Uno de los más comunes es la planta de jade. Los ficus también están disponibles y son una excelente opción para los principiantes. Son absolutamente indulgentes, que permite algunos dolores crecientes al aprender cuidar para un árbol de los bonsai.
Mantener una planta en miniatura es todo un reto. Está en su naturaleza intentar crecer hasta su plena madurez. Un bonsái mal cuidado muere o crece sin control. Si se está iniciando en el mundo del bonsái, una investigación básica puede ayudarle a mantener viva su planta.
En este post vamos a hablar de:
* El cultivo del bonsái
* Riego
* Colocación del Bonsái y mucho más
Cultivo del Bonsái
El cuidado de un Bonsái varía según el tipo de planta. Algunas plantas necesitan más luz solar o menos humedad que otras. Para un crecimiento óptimo, conozca su planta en particular y lo que necesita. Sin embargo, hay algunas pautas básicas que se deben seguir. Comprender el cultivo de bonsáis de interior (riego, colocación, humedad, etc.) puede ayudar a un principiante a saber qué tipo de información debe buscar.
Riego
Como todas las plantas, el riego es esencial. Cuando se cuidan plantas de interior, el riego adecuado es aún más imperativo. Las plantas que viven en una maceta dependen totalmente de su cuidador para regular el suministro de agua. Tanto el riego excesivo como el insuficiente son perjudiciales para la planta.
Al regar un bonsái, vierta siempre agua en la tierra, no en las hojas. El objetivo es suministrar el agua adecuada al sistema radicular. Es fundamental no dejar que la tierra se seque por completo entre riego y riego. Es probable que necesite tiempo para aprender con qué frecuencia lo necesita la planta. En lugares más cálidos y soleados, el bonsái va a necesitar agua con más frecuencia. La mejor forma de comprobar el contenido de agua de la tierra es con un medidor de humedad. El medidor de humedad puede leer exactamente cuánta humedad hay en la tierra, indicándole si necesita agua o no. Si eres principiante, no es imprescindible que adquieras este aparato. Otra forma de comprobar el nivel de humedad es meter el dedo en la tierra. Así sabrás si la tierra sigue húmeda o se está secando. Como principiante, observe su planta y compruébelo con regularidad. Sólo así sabrá qué necesita su bonsái.
Su maceta de bonsái debe tener agujeros de drenaje en el fondo. Aplique abundante agua hasta que la humedad gotee por los agujeros del fondo. Esto proporcionará a la planta el agua adecuada. El método de riego también es importante. El agua debe aplicarse suavemente y en forma de lluvia. Si se aplica con demasiada fuerza, la tierra puede removerse y desbordarse por los bordes de la maceta. Esto no sólo ensucia, sino que obliga a añadir más tierra a la maceta.
Colocación del Bonsái
En temperaturas y climas más cálidos, las plantas bonsái pueden mantenerse en el exterior. Colócalo en un lugar del balcón, un patio o el jardín donde pueda recibir sol por la mañana pero sombra por la tarde. Como la planta vive en el interior durante parte del año, es esencial no colocarla a demasiado sol. El shock de vivir a pleno sol de la tarde puede matar a la planta. O bien, podría vivir todo el verano a pleno sol, pero luego morir al volver a meterla en el interior para el invierno. Tu objetivo es regular el sol y el calor que recibe la planta.
Cuando lleguen las bajas temperaturas, o si vives en una zona con clima invernal, deberás llevar tu bonsái al interior durante esta época del año. Un buen momento para llevarlo al interior es cuando el clima alcanza entre 40 y 50 grados Fahrenheit (4-10 grados Celsius). Lo mejor es colocar el bonsái en el alféizar de una ventana orientada al sur. Si no está orientado al sur, puede ser una buena idea colocar el bonsái bajo una luz de cultivo. También puede ser una buena idea si vives muy al norte, donde los inviernos son extremadamente fríos.
Humedad
La humedad, o contenido de humedad en el aire, es otra variable crucial en el cultivo del bonsái. En los meses más fríos, tiende a haber menos humedad en el aire. El problema es que a los bonsáis les gusta la humedad. Para ayudar a proporcionar este ambiente, pruebe a colocar su maceta sobre una bandeja poco profunda. Llena el plato con guijarros decorativos y luego cubre la bandeja con agua. El agua de la bandeja se evapora lentamente y actúa como fuente de humedad para tu planta de bonsái.
Pinzado
Pellizcar es la forma de mantener el árbol en miniatura. Si no se pellizca, la planta crecerá demasiado y superará con creces el tamaño de un bonsái típico. Los nuevos brotes deben pinzarse (recortarse), pero nunca eliminarse por completo. La planta necesita un poco de crecimiento para mantenerse sana. Durante los meses cálidos, la planta está en pleno crecimiento, por lo que requiere más pellizcos. En invierno, el mantenimiento es menos frecuente. Cada tipo de bonsái crece a su ritmo. Observe sus plantas y ajuste la frecuencia de pinzado a su crecimiento.
Abonado
La mayoría de la gente asocia la fertilización con un mayor crecimiento. Aunque esto es cierto, la fertilización también se realiza para mantener una planta sana y verde. Las plantas de bonsái crecen en una cantidad mínima de tierra. Por ello, los nutrientes disponibles son limitados. Por lo tanto, el abono debe añadirse en pequeñas dosis. La mayoría de los fertilizantes de uso general funcionan bien. Sin embargo, no lo aplique a plena potencia. Dilúyalo a la mitad de su potencia indicada. Se recomienda que su bonsái necesite abono una vez al mes durante su temporada alta de crecimiento. En la temporada de reposo vegetativo, no abone la planta, no lo necesita.