Existen muchos tipos de plantas subacuáticas. También se conocen como macrófitas acuáticas e hidrófitas. Estas plantas y flores viven en zonas llenas de agua, como lagos, océanos, estanques, ríos y arroyos. Aquí vamos a aprender lo siguiente: * Características de las plantas acuáticas y subacuáticas * Tipos de plantas acuáticas * Diferentes flores acuáticas * Cuidados de las plantas acuáticas y subacuáticas
Características de las plantas acuáticas y subacuáticas
Hay una serie de características que las plantas subacuáticas comparten entre sí. Por ejemplo, la mayoría de las plantas que viven en el agua no necesitan cutículas y, si las tienen, son muy finas. La cutícula es una parte de la planta que impide la pérdida de agua. Otra característica común de las plantas acuáticas y subacuáticas es que siempre tienen los estomas abiertos, y en cada hoja hay muchos. Como la presión del agua sostiene a estas plantas, tampoco son tan rígidas estructuralmente como las plantas que crecen en tierra. Como estas plantas pueden flotar, también suelen tener hojas planas. En el caso de las plantas que SÍ flotan, comparten la característica de tener sacos de aire. Además, las raíces de estas plantas suelen ser más pequeñas que los sistemas radiculares de las plantas que crecen en tierra y, en general, las raíces tienen un aspecto plumoso y ligero, y sirven para aportar oxígeno del agua en la que crecen
Tipos de plantas acuáticas
Existen tres tipos principales de plantas acuáticas. Son las siguientes: Plantas totalmente sumergidas: son verdaderas plantas subacuáticas, ya que crecen completamente bajo la superficie. Un ejemplo de esta planta es la estrella de agua. Plantas que flotan en la superficie del agua – Estas plantas tienen sus raíces flotando en el agua, como en el caso de los nenúfares, o enraizadas en el sedimento que flota en la superficie del agua, como la lenteja de agua. Plantas que crecen en zonas pantanosas – Por último, tenemos las plantas palustres, que son aquellas que tienen la parte inferior de la planta sumergida, pero el resto de la planta crece por encima del agua. Un ejemplo de ello es la maza de caña
Diferentes flores acuáticas
Algunas de las plantas acuáticas tienen flores, que ahora se ven a menudo en los jardines de los vecinos. Un estanque o jardín acuático puede aportar mucha paz y tranquilidad, sobre todo si se le añaden elementos como una pequeña fuente o una zona de meditación. Éstos son algunos de los tipos más comunes de flores acuáticas que quizá desee añadir a un jardín exterior. Amapola de agua – La amapola de agua tiene pequeñas flores amarillas y las hojas son de color verde brillante. Estas flores aparecen durante los últimos meses de la primavera o los primeros del verano y, como son pequeñas, combinan bien con otras plantas acuáticas. Nenúfares – El nenúfar es una planta común que suele llamarse nenúfar. A menudo se ven de forma natural en los estanques, e incluso puede que veas a una ranita subirse a una de estas plantas. La flor del nenúfar que aparece ayuda a dar sombra uniforme a las zonas del estanque, y contribuyen a reducir el crecimiento de algas y a mantener el agua clara y limpia. Nenúfares pigmeos – También puede encontrar nenúfares pigmeos, que no son tan grandes como los nenúfares en los que muchos pensamos. Estas plantas son perfectas para estanques pequeños o tinas de jardín. Espino de agua – Esta planta produce flores blancas con un centro negro que tienen una hermosa fragancia. Las hojas verdes son impresionantes y florecen durante gran parte del año en climas cálidos. Esta planta es preciosa cuando se combina con nenúfares. Lechuga de agua – Parece un cogollo de lechuga flotante y es una planta divertida y única para poner en un jardín acuático. Tenga en cuenta que no crece bien en climas fríos. Cola de lagarto: esta planta tiene flores blancas y hojas en forma de corazón. La planta florece en verano y necesita pleno sol. Lenteja de agua – Esta planta flotante es una gran adición a cualquier estanque que albergue peces. La planta tiene un precioso tono verde y ofrece alimento y refugio a la fauna que vive en el estanque. Berro de agua – Esta planta crece rápidamente y tiene unas bonitas florecillas blancas. Necesita mucho sol, pero lo bueno del berro de agua es que se puede comer. Iris japonés – Por último, tenemos el iris japonés, que tiene flores de color rojo oscuro, morado o blanco. Necesitan mucho sol y sólo crecen en climas cálidos, ya que suelen florecer en noviembre y diciembre
Cuidado de las plantas acuáticas y subacuáticas
Si te gusta la jardinería o tienes una zona que podría albergar un bonito elemento acuático, quizá quieras plantearte plantar plantas subacuáticas. Un jardín acuático es impresionante y único, por lo que mucha gente quiere tener uno… pero requiere ciertos cuidados. Una de las cosas de las que debes asegurarte es de elegir las flores adecuadas para tu zona. Por ejemplo, el iris acuático y el nenúfar son bastante resistentes, por lo que pueden soportar alguna helada nocturna. Sin embargo, las plantas acuáticas como el botón de oro requieren un clima más cálido. Las plantas que están totalmente sumergidas, como la hierba anguila y los plataneros, pueden aguantar climas más fríos, y como desprenden mucho oxígeno, si tienes caracoles o peces en el estanque, son una gran elección. Además, recuerda esto: cuanto más grande sea tu estanque, mejor y más fuerte será el ecosistema. Sin embargo, si sólo puedes tener un jardín acuático pequeño, debes asegurarte de añadir el filtro de agua. También debes asegurarte de que el recipiente sea profundo. Es importante que coloques tierra en el fondo del recipiente a unos 5 o 6 cm de profundidad. Para evitar que la tierra se mezcle con el agua, añade grava o guijarros gruesos encima. También puedes coger macetas y sumergirlas. Para asegurarte de que tus plantas tienen un aspecto saludable, debes dedicar tiempo cada pocas semanas a revisar el estanque en busca de cualquier planta acuática invasora que pueda colarse en tu estanque o contenedor. La temperatura también es importante, así que quizá quieras instalar un calentador si vives en un clima más frío. Comprueba también los niveles de oxígeno y dióxido de carbono, así como el pH del agua. Por último, asegúrate de retirar periódicamente del estanque cualquier material vegetal enraizado o muerto.