Las rosas son una de las flores más populares y emblemáticas del mundo. Conocidas por su intenso color rojo, también existen en blanco, morado, rosa y amarillo, cada una con su propio significado. Así que, si quieres saber más sobre el simbolismo de las rosas amarillas, sigue leyendo para conocer algunos datos interesantes: – el simbolismo de las rosas amarillas – la historia de este tipo de flor – diferentes ocasiones que son perfectas para las rosas amarillas – razones para comprar rosas amarillas
El simbolismo de las rosas amarillas
El amarillo confiere a la rosa un carácter alegre y jovial. Al igual que el sol, transmite calidez y felicidad, por lo que no es de extrañar que las rosas amarillas representen principalmente la amistad. En el pasado, estas flores se utilizaban para representar los celos, pero con el tiempo pasaron a representar algo mucho más feliz. Además de la amistad, las rosas amarillas pueden enviar un mensaje de alegría, cariño y afecto a quienquiera que sea el destinatario. Así que, si quiere enviar un regalo que diga «bienvenido» o «buena suerte», ¡las rosas amarillas son perfectas! En general, esta flor de vivos colores es una alegre adaptación de su popularísima versión roja. Su color por sí solo tiene el poder de alegrar el día a cualquiera. Por lo tanto, las rosas amarillas son perfectas para ocasiones especiales o para amigos a los que sólo quieras decir: «Estoy pensando en ti
La historia de las rosas amarillas
Se dice que las rosas tienen unos 35 millones de años. Desde entonces, esta flor se ha abierto camino en la cultura de todo el mundo. Las rosas no se cultivaron para jardines hasta hace unos 5.000 años. Durante esos primeros tiempos, esta flor se cultivaba principalmente en Oriente Próximo y se utilizaba como decoración, confeti y uso medicinal. Las rosas se popularizaron durante el imperio romano, ya que los miembros de la clase alta establecían rosaledas públicas en las que lucían esta hermosa flor. Una vez que se produjo la caída del imperio romano, la popularidad de las rosas fluctuó entre épocas. Las rosas eran tan queridas en el siglo XVII que se utilizaban como forma de pago. Pero fue a finales del siglo XVIII cuando el mundo entero conoció la rosa moderna que todos amamos hoy. Estas flores eran capaces de florecer año tras año durante periodos más largos. Con estas rosas cultivadas, el mundo pudo disfrutar de la flor durante periodos más largos cada temporada de floración. Aunque las rosas blancas y rosas fueron los primeros colores que exhibieron las rosas, las rosas amarillas se hicieron muy conocidas en toda Europa y el resto del mundo cuando se descubrieron creciendo como flores silvestres en Oriente Medio. Había muchos tonos diferentes de amarillo que permitían la creatividad en la hibridación. Tras el descubrimiento de las rosas amarillas, los europeos se enamoraron y este color de rosa se hizo extremadamente popular. Los europeos, en particular los franceses y holandeses, se interesaron tanto por la hibridación de las rosas, que el número de especies de rosas aumentó enormemente en el siglo XVIII. Llegó a haber muchos colores y muchos estilos diferentes de esta hermosa flor. Ahora, gracias a los muchos años de cultivo, la rosa moderna posee la dulce fragancia por la que es conocida. Originalmente, la rosa no tenía mucho olor. Hoy, su fragancia es una de sus características más populares. En la época victoriana, las rosas amarillas eran símbolo de celos y se enviaban a las personas acusándolas de traición o infidelidad. Por suerte, este simbolismo ha cambiado con el tiempo y ahora las rosas amarillas se asocian con la felicidad y la amistad. Hoy en día, las rosas son ampliamente conocidas como símbolo de amor y afecto. Se cultivan popularmente en jardines y es habitual encontrarlas en ramos y arreglos florales para ocasiones especiales. Además, la rosa es la flor nacional de muchos países, como Luxemburgo, Estados Unidos y el Reino Unido. Aunque la rosa amarilla no sea la flor nacional de un país, sigue ocupando un lugar destacado en la floristería y la cultura
Ocasiones perfectas para las rosas amarillas
Como símbolo de amistad, las rosas amarillas son perfectas para ocasiones en las que hay amigos o familiares. Su color brillante transmite un mensaje de optimismo y felicidad a cualquier habitación en la que se encuentren. Estas rosas son perfectas para desear «buena suerte» a un amigo o para cuando un amigo necesita un poco de ánimo. Las rosas amarillas contagian fácilmente el deleite a todos sus destinatarios. Estas flores también son excelentes mensajeras de felicitaciones. Pueden añadir un poco más de positividad a una ocasión ya de por sí alegre. Algunos ejemplos de ocasiones que son perfectas para las rosas amarillas son los cumpleaños, las graduaciones, los compromisos, las bodas, el nacimiento de un hijo o simplemente para una forma divertida de decir que está pensando en alguien. Además, las rosas amarillas son estupendas para cualquier ocasión en la que simplemente quiera crear un poco más de felicidad. Aunque se dice que no hay que regalarlas para cortejar a un interés romántico. Las rosas amarillas son un símbolo de amistad platónica. Sin embargo, estas flores son tan bonitas y versátiles que pueden utilizarse para cualquier ocasión que desee su corazón
Razones para comprar rosas amarillas
Las rosas amarillas son flores preciosas que todo el mundo puede apreciar. Su color por sí solo puede alegrar instantáneamente el día a alguien, ya que el amarillo se asocia con la alegría y los sentimientos felices. El amarillo es siempre el color perfecto para los buenos momentos y los sentimientos alegres. Estas rosas también tienen la característica fragancia fresca, gracias a años de hibridación y cultivo. Así pues, las rosas amarillas no sólo tienen el poder de alegrar una habitación, sino también de difundir su fresco aroma. En general, las rosas amarillas, aunque no son el color de rosa más popular, siguen mereciendo atención. Su cautivador color es tan alegre que todo el mundo se siente mejor con sólo mirar las flores. Las rosas amarillas son versátiles cuando se trata de la ocasión en la que se presentan. Perfectas para cualquier ocasión divertida y alegre, pueden difundir un poco de calidez y positividad en cualquier lugar.