Si somos afortunados y en nuestro hogar contamos con un pequeño o gran jardín seguro que lo tendremos repleto de bonitas flores, plantas y árboles que le den color, aroma y nos cobijen del sol a media tarde, y es que a quien no le gusta tumbarse en un jardín a escuchar música o leer un libro bajo la sombra de un árbol y con el aroma de las rosas plantadas al lado.
Si nos apasionan las flores y plantas pero no tenemos demasiadas nociones sobre jardinería lo primero que tenemos que hacer es acudir a un centro especializado donde nos indiquen cuales son las especies más adecuadas para plantar en nuestro jardín, qué tipo de abono y cuidados necesitan y sobretodo qué tipo de riego es el más adecuado para cada una de ellas, y es que hay muchas formas de dar agua a nuestras flores y mientras algunas prefieren métodos más tradicionales y suaves como es el riego con regadera otras agradecen el riego lento y continuado de los sistemas de goteo.
Enumeramos algunos de los sistemas de riego más conocidos que podemos utilizar en nuestro jardín (existen muchos otros tipos, así que lo mejor es asesorarse bien en lugares como Leroy Merlín o floristerías de confianza).
– Regadera: La forma más tradicional y personal de regar nuestras flores y plantas. Todos tenemos en casa una pequeña regadera que nos ayuda a regar las plantas de interior o las que se encuentran en el balcón. Ahora bien, si nuestro jardín es muy grande y tenemos demasiadas flores quizás este sistema es lento y sobretodo cansado (habrá que rellenarla varias veces, agacharnos y levantarnos, etc.)
– Manguera: Es uno de los sistemas más utilizados en terrazas, patios y jardines ya que con una sola pasada podemos abastecer de agua nuestras plantas y flores y de paso limpiar la superficie de polvo, tierra y demás elementos que no deberían estar ahí. Ahora bien, dependiendo del tamaño y forma de nuestro jardín necesitaremos más o menos metros de manguera así que hay que tenerlo en cuenta a la hora de determinar el sistema de riego.
– Aspersores: Es el rey de los sistemas en grandes jardines ya que con un programa sencillo podemos conseguir que nuestro jardín se riegue a la hora que queremos y sin tener que movernos del sofá. Corremos el peligro de no acordarnos cuando van a funcionar y darnos una ducha no deseada pero aparte de esto, es el sistema más cómodo para jardines grandes.
– Goteo: Es el sistema más sofisticado de este listado ya que utiliza una pequeña tubería que suelta gotas de agua permitiendo que la tierra siempre esté húmeda. Además ayuda a que la superficie esté fértil ya que podemos hacer que en el goteo caiga fertilizante líquido y esto ayuda a que las flores, plantas y árboles estén más sanos y nutridos.