Hoy queremos iniciar en el blog de FloraQueen una nueva serie de artículos, dedicados a la flor del mes. En mayo la elegida es el lirio, una planta elegante y vistosa.
Sigue leyendo y descubre todos los secretos de esta flor, desde los lugares del mundo en que se puede encontrar hasta su potente simbología.
Características
El lirio (también llamado coloquialmente azucena) se inscribe dentro del género Lilium, integrado por unas 110 especies diferentes; este género pertenece, a su vez, a la familia de las liliáceas.
La planta crece de un bulbo subterráneo, que le permite conseguir los nutrientes necesarios para subsistir durante el invierno; de este bulbo surgen frondosos tallos y grandes flores que desprenden un intenso aroma.
Estas flores pueden aparecer en una amplia variedad de colores (blanco, amarillo, naranja, rosa, rojo, púrpura), y presentarse también con manchas o pinceladas en otras tonalidades. La floración de la planta del lirio se produce a finales de la primavera y durante el verano.
Hábitat y cultivo
El hábitat natural del lirio es el hemisferio norte: esta planta se puede encontrar en la mayor parte de Europa, en algunas zonas de Asia, como Japón, India y el sur de Filipinas y en el sur de Canadá y todo Estados Unidos.
Existen pruebas del cultivo de lirios que datan de hace más de 3.000 años. Ya en el antiguo Egipto se trataba de una flor muy popular que podía encontrarse en jardines con un diseño muy cuidado.
Usos medicinales y culinarios
Con las flores de lirio se obtienen unos aceites naturales que destacan por sus propiedades hidratantes y que son perfectos para elaborar geles de baño o cremas para bebés y adultos con pieles sensibles.
Una infusión de lirio tiene un efecto diurético y expectorante; también ayudar a combatir el asma, la bronquitis, el dolor de cabeza y los catarros, especialmente si se añade miel al resultado.
En China, Japón y Taiwán, se utilizan los bulbos del lirio para dar sabor a algunos platos, como pueden ser sopas o postres. Sus flores también se comen durante el verano, ya que se cree que ayudan a reducir el calor corporal.
Simbología
El lirio cuenta con su propia representación simbólica en heráldica, la archiconocida flor de lis. Suele aparecer en forma de flor de color amarillo sobre fondo azul y ya en la Edad Media se convirtió en el símbolo de la realeza francesa. Este hecho hace que se asocie a esta flor con características como la elegancia, el poder o el honor.
La flor de lis es una de las cuatro figuras más populares de la heráldica (junto a la cruz, el águila y el león), por esta razón se puede encontrar en un gran número de escudos y blasones. Por ejemplo, es el emblema de la ciudad de Florencia y aparece tanto en su bandera como en su escudo.
Esta representación visual del lirio, además, está dotada de una fuerte simbología religiosa: se utiliza como símbolo de la Virgen María, también como representación de la Santísima Trinidad (por sus tres pétalos) y en la Cruz de Santiago tres de sus puntas acaban en una flor de lis.
¿Has descubierto nuevos detalles sobre nuestra flor del mes? Déjanos tus comentarios sobre qué parte del artículo te ha resultado más interesante y, ya sabes, ¡el próximo mes, conocerás más a fondo otro tipo de flor!